¿Cuándo cambiar la silla infantil del coche?
03/10/2017 Hasta la implantación completa de la nueva normativa de homologación, los sistemas de retención se siguen clasificando en cuatro grupos de peso y altura.
Coincidiendo con la vuelta al cole, la Dirección General de Tráfico activaba hace un par de semanas una campaña especial de vigilancia sobre el uso del cinturón de seguridad y los sistemas de retención infantil, es decir, las sillitas de los más pequeños para viajar en los vehículos. En solo siete días, más de 2.200 personas fueron detectadas sin hacer uso de estos sistemas de seguridad mientras circulaban por las carreteras del país. 198 menores viajaban sin sistema de retención infantil, 41 de ellos en el asiento delantero. No solo la dirección General de Tráfico. Otros organismos y asociaciones reiteran con frecuencia un mensaje claro: el uso de esos sistemas es un seguro de vida y evita lesiones de importancia en los más pequeños. Hay que usarlos y hacerlo bien, teniendo muy en cuenta cual es la silla que se corresponde con el peso y la edad de nuestros hijos.
Como norma general de partida se debe recordar que los menores de edad, de estatura igual o inferior a 135 centímetros, además de llevar su silla homologada y debidamente adaptada a su talla y peso, deberán situarse en los asientos traseros.
La duda asalta a los padres tarde o temprano, ¿en qué momento se debe cambiar la silla infantil?
A día de hoy, y desde 2013, conviven dos normativas de homologación de sistema de retención infantil. La llamada ECE R44, que sigue regulando los sistemas de retención, y la conocida como I-Size (ECE R129), que mejora la seguridad frente a impactos en colisiones laterales y frontales, ofrece una mayor probabilidad de anclaje correcto de la sillita en el vehículo, y amplía el tiempo de viaje del niño en sentido contrario a la marcha. Sin embargo, y como recuerda la DGT, siguen vigentes los cuatro grupos que, teniendo en cuenta el peso y la altura del niño, actúan de guía para elegir el sistema de retención adecuado.
De recién nacido hasta 13 kilos (unos 18 meses aproximadamente). Grupo 0 y 0+
Estas sillas se utilizan en sentido contrario de la marcha, y en el asiento trasero, para proteger mejor la cabeza, cuello y columna del bebé. Se usa con arnés de cinco puntos de anclaje. Se pueden utilizar capazos, que deben ir en el asiento trasero e instalado de forma transversal a la marcha. Desde la DGT se recuerda que si el bebé no supera aún los 13 kilos pero su cabeza sobresale del respaldo, es hora de cambiar la silla.
De 9 a 18 kilos (de 1 a 4 años aprox.). Grupo 1
En este caso el sistema de retención adecuado es una silla anclada al vehículo, ya sea mediante el cinturón de seguridad o mediante el sistema Isofix (el más recomendable y seguro por sus puntos de anclaje en el vehículo). El niño queda sujeto mediante arnés de cinco puntos que siempre debe ir ajustado al cuerpo. Es importante que el bebé no saque los brazos del arnés. Esta silla evita lesiones de cabeza y columna.
De 15 a 36 kilos (De 4 a 12 años aprox.) Grupos 2 y 3
Corresponde a los asientos y cojines elevadores. Está indicado para el momento en el que el niño es demasiado grande para una silla y demasiado pequeño para el cinturón de seguridad. La nueva normativa de homologación hará desaparecer el elevador sin respaldo, aunque a día de hoy, como subrayan desde el RACE, no está prohibido su uso (solo lo estará en caso de que así lo recoja el Reglamento de Tráfico o lo indique la normativa del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad). El técnico de Seguridad Vial del club automovilístico, David Fernández, sin embargo, recomienda el uso de los dispositivos con respaldo, por cuanto ofrecen una mayor seguridad.
Los elevadores funcionan elevando al niño hasta alcanzar la altura necesaria para utilizar el propio cinturón de seguridad de forma correcta. La banda diagonal del cinturón ha de pasar por encima de la clavícula y sobre el hombro sin tocar el cuello. La banda horizontal, lo más baja posible sobre las caderas y muslos y no sobre el estómago.
A partir de 135 centímetros de altura (mayores de 12 años aprox.)
Excepcionalmente los menores de 12 años de estatura igual o superior de 135 centímetros podrán utilizar directamente los cinturones de seguridad del propio vehículo. No obstante, hasta los 135 centímetros es recomendable que los menores sigan utilizando un sistema de retención infantil homologado a su talla y peso. En todos los casos, la banda diagonal del cinturón ha de pasar por la clavícula, sobre el hombro y bien pegada al pecho, mientras que la banda horizontal ha de quedar lo más baja posible sobre la cadera. Si la banda del hombro toca el cuello o pasa bajo el mentón, el niño debe seguir utilizando un asiendo elevador.
A partir de la entrada del nuevo reglamento las sillas indicarán el rango de altura y una edad orientativa del ocupante. Esto facilitará la elección de la silla adecuada al niño y quedará más claro para los padres cuándo debe ser sustituida. La nueva normativa prohibirá la homologación de alzador sin respaldo para niños que miden 122 centímetros o menos. Sin embargo, como explica el técnico de Seguridad Vial del RACE, David Fernández, de momento el mercado solo ofrece sistema de retención adaptados a la nueva normativa para el grupo 0. Solo una vez que los fabricantes comiencen a comercializar las sillas adaptadas a la homologación I-Size para el resto de grupos, dejarán de convivir ambas normativas.
Fuente: Diario Sur 1/10/17
Se puede obtener más información sobre Seguridad Vial Infantil en la web de la DGT www.dgt.es ; y en la del RACE www.race.es.
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